lunes, 28 de febrero de 2011

La revista De Stijl (1917-1932)

Vilmos Huszár, Portada del primer
número de la revista, octubre 1917
«La tarea ética y estética que había emprendido De Stijl estaría encaminada a renovar los lazos que unían el arte con la vida. Los artistas neoplásticos pensaban que con la creación un nuevo estilo visual estarían fundando también un nuevo estilo de vida».

De Stijl [1], la primera revista de vanguardia dedicada a la causa de la abstracción en el arte y la arquitectura [2], vio la luz en octubre [3] de 1917 con un texto en su portada que decía: «De Stijl, revista de las artes visuales modernas, edición Theo van Doesburg con la participación de colaboradores nacionales y extranjeros. Edición Harms Tiepen en Delft en 1917».

«Esta revista quiere ser una contribución al desarrollo de una nueva conciencia estética» [4], serían las primeras líneas de la introducción del redactor de la revista, Theo van Doesburg [5] (1883-1931), fechado en Leiden el 16-VI-1917.

Una de las funciones de la revista en sus primeros años fue poner en constante circulación imágenes de las obras más representativas para captar la atención y ratificar las similitudes estilísticas del grupo, de esta forma se pretendía enlazar esas características formales comunes a las ideas teóricas promovidas a través de la revista. Las ilustraciones en De Stijl se diseñaban para exponer la unidad estilística y validar el trabajo de los colaboradores, a quienes se les ofrecía un foro donde escribir sobre su trabajo y el del resto de artistas del grupo [6].

De Nieuwe Beelding als Stijl [7] o, lo que es lo mismo, La nueva imagen como estilo, fue el nombre con el que Mondrian titularía su artículo publicado en el segundo número de De Stijl en diciembre de 1917, en el que el artista definiría uno de los conceptos más importantes del lenguaje neoplástico y que daría nombre a su órgano de prensa: el estilo. Con este término los artistas no se referían un conjunto de características formales, sino a una voluntad de forma que iba más allá del arte mismo. La lucha de estilo que propugnaban los artistas de De Stijl no buscaba imponer unas determinadas formas, su objetivo era lograr expresar lo intemporal (universal), lo eterno y aquello que convierte a cada estilo en estilo [8].

Según los artistas neoplásticos, en la naturaleza lo individual del estilo está unido completamente a lo particular −la apariencia natural de las cosas−, mientras que en el arte lo individual del estilo tiene que estar completamente liberado de ella y estar solamente unido al tiempo y al lugar, es por ello que si el arte expresa el estilo por completo, debe liberarse de tal manera de la apariencia natural de las cosas que no las exprese: tiene que expresar la tensión de la forma, la intensidad del color y la armonía, lo que muestra la naturaleza en una apariencia abstracta. Según esta definición, «el artista sería aquél que fuera capaz de descubrir en las cosas esta armonía oculta, el equilibrio Universal, sabiendo, además, darle forma. Así, la obra de arte (más exacta) es una parábola del Universo» [9].

En el momento de la fundación de la revista, Europa se encontraba inmersa en la Gran Guerra y en Rusia tenía lugar la Revolución de Octubre, a pesar de ello, el grupo no estaría tan interesado por la guerra y la revolución como por la fuerte turbulencia que había prevalecido en el arte internacional durante la década precedente. El movimiento se produjo en un período de caos absoluto en el que la mayoría de los europeos sentía anhelos de armonía y equilibrio. 

En Hacia una nueva formación del mundo, van Doesburg desprecia de manera radical y arrogante las hegemonías capitalista y socialista y afirma un orden universal basado en un espíritu nuevo [10]:

«Europa está perdida. La concentración y la propiedad, el individualismo espiritual y material, eran las bases de la antigua Europa. Ahora se ha hecho prisionera de ellas. Y no puede liberarse. Se va a desintegrar, se va a arruinar. Nosotros lo observamos tranquilos. Aunque pudiéramos ayudar, no querríamos hacerlo. No deseamos prolongar la vida de esta vieja prostituta. En nosotros ha empezado ya a crecer una Europa nueva. Las ridículas internacionales socialistas 1-2-3 fueron sólo externas; existieron en palabras. La internacional del espíritu es interna, callada. No existe en palabras, sino en hechos visuales y en fuerza interior. Con eso se está formando el nuevo sistema del mundo» [11].
Esta tarea ética y estética que había emprendido De Stijl estaría encaminada a renovar los lazos que unían el arte con la vida y los artistas neoplásticos pensaban que con la creación un nuevo estilo visual estarían fundando también un nuevo estilo de vida [12]. Si la capacidad creativa del hombre se aplicaba a todo lo que lo rodeaba −los objetos de la vida cotidiana, los productos de la industria y el entorno urbano− entre el arte y la vida se volvería a restablecer esa unidad que se nunca se debería haber quebrado. En palabras de Mondrian, «cuando el arte se transforme en la vida real llegará el fin del arte de hoy día» [13].

Manifiesto I de De Stijl, 1918.
  1. Hay una vieja y una nueva conciencia del tiempo.
    La vieja tiende a lo individual.
    La nueva a lo universal.
    La lucha entre lo individual y lo universal se manifiesta tanto en la guerra mundial como en el arte de nuestro tiempo.
  1. La guerra destruye el viejo mundo con su contenido: el dominio de lo individual en todos los campos.
  2. El arte nuevo ha puesto de relieve el contenido de la nueva conciencia del tiempo: la relación equilibrada de lo universal y lo individual.
  3. La nueva conciencia del tiempo está ya dispuesta para realizarse en todo, incluso en la vida externa.
  4. Las tradiciones, los dogmas y el dominio de lo individual (lo natural) son un obstáculo para esta realización.
  5. Por eso los fundadores del neoplasticismo exhortan a todos los que creen en la reforma del arte y de la cultura a eliminar estos obstáculos en su desarrollo, igual que el neoplasticismo artístico elimina, mediante la supresión de la forma natural, todo lo que entorpece la pura expresión del arte, última consecuencia de cualquier noción de arte.
  6. Los artistas de hoy día, guiados en todo el mundo por una misma conciencia, participan en el terreno espiritual en la guerra mundial contra el dominio del individualismo, de la arbitrariedad.

    Por eso simpatizan con todos los que, ya sea espiritual o materialmente, luchan por la formación de una unidad internacional en la Vida, el Arte y la Cultura.
  1. El órgano De Stijl, que se ha fundado con esta intención, trata de contribuir a iluminar esta concepción de la vida. La contribución de todos es posible:
  2. I. Enviando (a la Redacción) como testimonio de aprobación su nombre (completo), señas y profesión.
    II. Contribuyendo en sentido amplio (crítica, filosofía, arquitectura, ciencia, literatura, música, etc., así como con reproducciones) en la revista De Stijl.
    III. Traduciendo a otras lenguas y difundiendo las ideas publicadas en De Stijl.
Theo van Doesburg, Rob van’t Hoff, Vilmos Huszár, Antony Kok, Piet Mondrian, G. Vantongerloo, Jan Wils. 

El dernier numéro [14] de De Stijl fue publicado en enero de 1932 en homenaje a Theo van Doesburg, que había fallecido en marzo del año anterior, aunque el último número de la revista había sido publicado en 1928, al ser van Doesburg el editor y −tras la marcha de Mondrian en 1925− su máximo (y casi único) impulsor, se consideran la fecha de su muerte como el final del movimiento De Stijl [15].


[1] La publicación del primer número de la revista se retrasó casi un año debido a problemas de distinta índole: escasez de papel durante la guerra, conflictos con el editor de Delft, Harms Tiepen, y problemas entre van Doesburg y Mondrian a la hora de seleccionar a las personas que finalmente colaborarían en la revista, entre otros. El primer número constaba de dieciséis páginas y mil ejemplares. Véase Crego Castaño, C., El espejo del orden. El arte y la estética del grupo holandés De Stijl, Madrid, Ediciones Akal, 1997, p. 15.
[2] Bois, Y. A., en VV.AA., Arte Desde 1900: Modernidad, Antimodernidad, Posmodernidad, Madrid, Akal, 2006, p. 99.
[3] Aunque el primer número aparezca fechado en octubre de 1917, no salió probablemente hasta principios de noviembre. En Overy, P., De Stijl, Londres, Thames and Hudson, 1991, p. 46.
[4] Nota introductoria de Charo Crego en Doesburg, Th. van, Principios del nuevo arte plástico y otros escritos, Murcia, Colegio Oficial de Aparejadores y Arquitectos, 1985, p.13.
[5] Su verdadero nombre era Christiaan Emil María Küpper (Utrecht, 1883 – Davos, 1931). El nombre por el que lo conocemos, Theo van Doesburg, lo tomó de su padrastro, Theodorus Doesburg, añadiendo van (de) para afianzar sus lazos filiales con él. A partir de su traslado a París en 1923, añadirá una tilde a su nombre de pila, eliminará el «van» de su apellido y transformará la «u» en «ou», Théo Doesbourg, a la manera francesa.
[6] Overy, P., op. cit., p. 12.
[7] Mondrian, P., “La nueva imagen como estilo” en La nueva imagen en la pintura, ed.cit. p. 23.
[8] Íbid., p. 24.
[9] Doesburg, Th. van, “Principios del nuevo arte plástico” op. cit., pp.80-82.
[10] Frampton, K., “Neoplasticismo y arquitectura: Formación y transformación”, en Friedman, M. (Coord.), De Stijl: 1917-1931. Visiones de Utopía, Madrid, Alianza Editorial, 1986, p. 105.
[11] De Stijl, IV, 8 (1921), pp. 123-126.
[12] Jaffé, J.L.H., “Introducción”, en Friedman, M. (Coord.), De Stijl: 1917-1931..., ed. cit., p. 11.
[13] Crego Castaño, C., op.cit., p. 119.
[14] Con el nombre escrito en diagonal, fue editado y compilado por su viuda, Nelly van Doesburg, con la colaboración de J.J.P. Oud y la participación de Mondrian y todos miembros que habían pertenecido a De Stijl, con la excepción de Huszár e, incomprensiblemente, de Rietveld.
[15] Warncke, C.P., De Stijl 1917-1931, Colonia, Benedikt Taschen, 1991, p. 198.

1 comentario:

  1. Hola necesito utilizar su imagen de la primera portada de la revista " de Stijl" que necesito para utilizarla para una publicación en una universidad de México.
    Gracias, quedo atenta.
    Miriam

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